El punch needle o bordado con aguja mágica es una técnica que permite crear bordados con muchos efectos tridimensionales y texturas. Esta técnica tiene un origen un tanto incierto, aunque se cree que proviene de Rusia. En Siberia es muy tradicional este tipo de bordado.

La aguja mágica proviene de Rusia, con ella se pueden hacer varias formas de bordado para darle dimensión a la manualidad. Se trata de una aguja hueca en su interior, por donde pasa el hilo. Por ello, para enhebrarlo el hilo debe pasar por el interior del mango.

Podemos encontrar varios tipos de agujas, según en los países en las que se utilice, que han ido adaptando la aguja mágica original hasta crear nuevos modelos. De hecho, unos cuentan con mangos de plástico o madera y en otros casos existen agujas intercambiables. Además, dependiendo del país se las conoce por un nombre. De esta forma, por ejemplo, en Argentina se las conoce como agujas de bordado chino, en México como aguja maravillosa y en Brasil como agujas de bordado ruso.

Para hacer bordado ruso se necesitan una serie de materiales indispensables, a parte de la propia aguja mágica, que son:

• La tela donde realizar el bordado. Las más recomendables son las telas de lino.
• Hilo de perlé o macramé.
• Papel de calco para el diseño que vayas a realizar.
• Aro de bordado.
• Tijeras.

El bordado con aguja mágica es característico por perforar la tela con la aguja. Al estar el hilo enhebrado en el interior de la aguja, la punta de esta perfora la tela y crea los puntos del bordado. Con cada grosos de aguja se puede controlar el largo de los hilos y crear diferentes volúmenes y largos de puntada.

Además, con este tipo de bordado, en lugar de sacar y meter el hilo y la aguja en cada punto, se hacen perforaciones pequeñas sobre la tela. De esta forma, el hilo va quedando sobre la superficie, formado los puntos. Así es como se logran los diferentes acabados y volúmenes.